Grafísk hönnun


  

Si el miedo me llenó de infelicidad en la niñez, multiplico en cambio las posibilidades de mi imaginación y me llevó a exorcizarlo a través del dibujo, contra mi propio miedo invente el miedo para otros, aunque esta por verse si los otros me lo agradecieron. En todo caso creo que un mundo sin miedo sería un mundo demasiado seguro de sí mismo, demasiado mecánico. Desconfío de los que afirman no haber tenido nunca miedo, o mienten, o son robots disimulados, y hay que ver el miedo que me dan a mi los robots.



1 comentario:

d dijo...

son casi las 2am y no sé como llegué hasta lo de los conejos enanos..! suerte con eso.